Después de haber devuelto su Informe Final de investigación en las manos del Ministerio peruano de Cultura (informe aprobado por el ministerio el 05 de septiembre de 2012 por nueva Resolución Directoral), Thierry Jamin se prepara en lo sucesivo para la siguiente etapa: la apertura de la famosa entrada, tapada por los Incas, hace más de cinco siglos.
El 22 de mayo de 2012, Thierry Jamin presenta oficialmente a las autoridades peruanas una solicitud para permitir a su equipo proceder a la apertura de las cámaras funerarias encontradas. Este nuevo proyecto de investigación se titulaba « Proyecto de Investigación Arqueológica (con excavación), con Posible Exhumación de Material Funerario de Alto Rango. Apertura de vano de acceso tapiado del Recinto 02, Sector II, Sub Sector E, Unidad 03, del Sector Urbano de la ciudadela inka de Machu Picchu”. El objetivo de este proyecto era la dada a luz de un probable tesoro arqueológico extraordinario y nuevos conocimientos sobre la historia olvidada de los Incas.
Dirigida por Thierry Jamin (Director Ejecutivo) e Hilbert Sumire Bustincio (Director oficial del proyecto arqueológico), la operación “Machu Picchu 2012″ gozaba de competencias profesionales reconocidas mundialmente, tal como el arquitecto y conservador peruano Victor Pimentel Gurmendi, Director de Conservación del proyecto. El señor Pimentel participó en 1964, a nombre del gobierno peruano, a la elaboración de la “Carta de Venecia“, el documento de referencia a nivel mundial en materia de protección y conservación de los monumentos históricos.
De los hechos
Teniendo en cuenta de la importante emoción suscitada en todo el Perú por estos incréibles descubrimientos y de las grandes polémicas generadas por parte de los responsables locales del Ministerio de Cultura (Dirección del Santuario Nacional Histórico de Machu Picchu e Dirección Regional de Cultura – Cusco), los Internautas encontrarán más abajo los hechos tales como se sucederon entre el 2012 y el 2014. Todas las informaciones son comprobables. Los Internautas encontrarán los documentos oficiales, los artículos de prensa, los documentos vídeos y audiofónicos, etc. ilustrando nuestras explicaciones en la rúbrica “Documentos” del presente sitio Web.
En el curso de los meses de junio a octubre del 2012, el proyecto “Machu Picchu 2012″ sera objeto de varias evaluaciones ante los servicios competentes del Ministerio de Cultura a Lima. En el curso de estas evaluaciones, el proyecto sera finalmente transmitido a la dirección del Santuario Nacional Histórico de Machu Picchu con el fin de obtener una opinión en cuanto a su viabilidad.
El 19 de julio de 2012, en su informe N° 189 – 2012 – DPANM – DRC – CUS / MC, la arqueóloga Piedad Champi Monterroso redacta un informe extremadamente negativo sobre el famoso proyecto: la entrada descubierta por David Crespy sería sólo una pared de tensión; el Instituto Inkari – Cusco sería una “organización extranjera”; el arqueólogo Hilbert Sumire sería sólo un “guía para turistas” y el equipo de Thierry Jamin un grupo de “buscadores de tesoros”, etc.
Eso era la evaluación “científica” del proyecto…
Por su parte, el Antropólogo Fernando Astete Victoria, director del Santuario de Machu Picchu, dirige una carta al Antropólogo David Ugarte Vega Centeno, Director Regional de Cultura – Cusco en la cual éste declara que el equipo del Instituto Inkari – Cusco jamás se habría coordinado con él en la realización de estas investigaciones realizadas en Machu Picchu. Sin embargo, éste estaba presente durante las resonancias electromagnéticas efectuadas en la ciudadela inca en abril de 2012 y parecía muy satisfecho del resultado de los géo-radares, como los documentos fotográficos vídeos ampliamente lo muestran.
En la misma carta, el señor Astete afirma que “el lugar al que hacen referencia (muro tapiado) fue desarmado y armado años atras, no sabiéndose exactamente en que época”. Sin embargo, ningún elemento material, ningún documento fotográfico ni algún informe será monstado por el antropólogo para confirmar sus afirmaciones.
Teniendo como base estos “elementos científicos”, los responsables del Ministerio de Cultura dirigen algunas semanas más tarde a Thierry Jamin e Hilbert Sumire su respuesta definitiva: el 05 de noviembre de 2012, por su Resolución Directoral N° 826 – 2012 – DGPC – VMPCIC / MC, el permiso de investigación esta negado al equipo del Instituto Inkari.
El 05 de diciembre de 2012, Thierry Jamin y Daniel Merino devuelven oficialmente al Ministerio de Cultura un documento en Apelación, pidiendo a las autoridades peruanas que reconsideren su decisión y reexaminen su proyecto de investigación tomándo como base criterios técnicos más objetivos.
El 19 de enero de 2013, el periódico peruano “El Comercio”, titula en primera planta “Indagan si en tumba de Machu Picchu hay oro”. Luego, el diario explica poco más abajo que “el posible hallazgo de objetos de oro y plata en una cámara funeraria en Machu Picchu enfrenta a un grupo de exploradores con el Ministerio de Cultura, que se niega a dar el permiso para seguir la investigación”. Luego el mismo diario, en su página A16, explica en cuatro columnas los descubrimientos realizados en abril de 2012 por el equipo de Thierry Jamin y el “conflicto” que le oponía en lo sucesivo con los responsables del Ministerio de Cultura. El tono era voluntariamente sensationnaliste. Los periodistas insistían en la “presencia de grandes cantidades de oro y plata”.
El 07 de febrero de 2013, la página web peruana de información “Rumbos” publica un artículo ancho sobre los descubrimientos realizados algunos meses antes por el equipo Inkari – Cusco. Esta vez los medios de comunicación nacionales repiten la noticia. Las numerosas radios locales y nacionales, como RPP, y las cadenas de televisión, como ATV, y numerosos periódicos se apoderan del asunto.
La noticia sobrepasa ampliamente las fronteras del Perú. El asunto esta repetido a través del mundo. Las polémicas pronto van a aparecer…
El 08 de febrero de 2013, el periódico “El diario del Cusco” titula en primera planta « Afirman que hallaron tumba de Pachacutek en Machu Picchu. Hipótesis de franceses fue cuestionada por autoridades peruanas ». El periódico de Cusco presenta detalladamente el descubrimiento de las cavidades subterráneas encontradas por el equipo de Thierry Jamin en abril de 2012 a Machu Picchu. Pero evoca la hipótesis de la tumba de Pachacútec como una certeza. Y por supuesto no olvida mencionar la presencia de depósitos de oro y plata: « Frances Thierry Jamin asegura que halló un mausoleao inca con grandes cantidades de oro y plata así como más de una decena de sarcofagos. » Declaraciones recogidas cerca de Thierry Jamin el día anterior, pero ampliamente deformadas.
En la misma edición, las autoridades locales del Ministerio de Cultura (Dirección Regional de Cultura – Cusco) afirman por su parte que “es imposible descubrir un tesoro escondido en la ciudadela inca”. Y el arqueólogo peruano Luis Lumbreras declara que “puso en duda el anuncio del francés, [y] asegura que el lugar fue saqueado durante la Colonia y señala de Jamin no es un personaje conocido”.
El periódico dedica luego la integridad de su página 12 al “asunto Machu Picchu”. En un artículo concedido al antropólogo David Ugarte Vega Centeno, El director Regional de Cultura del departamento de Cusco, éste declara que “es casi imposible que exista un tesoro escondido a Machu Picchu”. Desgraciadamente, la atención parece enfocarse en la presencia de oro y plata.
En el mismo artículo, Ugarte cualifica a Thierry Jamin de aventurero e indica que la ciudad inca de Machu Picchu habría sido saqueada por numerosas veces “El último en fecha,” dice, “fue Hiram Bingham”. David Ugarte afirma – pero sin aportar jamás ningún elemento técnico- que remover las piedras del edificio donde se encuentra la entrada descubierta por David Crespy, pondría en peligro toda la estructura del edificio.
El antiguo director regional de Cusco luego ironiza sobre Thierry Jamin: « Luego de la búsqueda del Paititi y El Dorado en los pasados años, ahora la fiebre es encontrar tesoros en Machu Picchu ».
El mismo día, en el periódico “Perú 21″, David Ugarte todavía dramatiza y declara que había que manejar la información que concerne al descubrimiento de las cavidades en el subsuelo del “Templo de las Tres Puertas” con mucha prudencia, « porque podríamos originar un saqueo o el desprendimiento de alguna infrastructura de nuestro principal ícono turístico. »
Por su parte, el periódico “Correo” del 8 de febrero también dedica un artículo en página 03 sobre este asunto. Allí todavía, los responsables de la Dirección Regional de Cultura – Cusco hacen todo para desacreditar el hallazgo. El artículo esta titulado: « Francés asegura que se trataría de contexto fúnerario de Pachacuteq. DRC desvirtúa hallazgo de tumba real. »
Ver también en su página 10 del diario “Trome”, del 8 de febrero de 2013, el artículo titulado « En Machu Picchu, habrían hallado tumba de Pachacútec ».
Durante toda esta época de fuertes polémicas, la actitud del arqueólogo peruano Luis Guillermo Lumbreras aparece más que desconcertante. En efecto, este arqueólogo de Lima pasó una gran parte de su vida buscando pruebas que demostraban que Machu Picchu era bien la Llactapata de los Incas, tal como el cronista Juan de Betanzos la describe en la “Suma y Narración de los Incas”. Y fue en esta Llactapata, según Betanzos (Capítulo XXX) que el emperador Pachacútec habría ordenado de construir su tumba, para él y su descendencia. También era la gran hipótesis de Luis Guillermo Lumbreras. Los Internautas curiosos encontrarán fácilmente en la web numerosos artículos y referencias de este arqueólogo demostrando esta teoría.
Por ejemplo, en 2005, Guillermo Lumbreras participó en la redacción del libro colectivo titulado “Machupicchu. Historia, Sacralidad e identidad”. En un muy largo artículo titulado “Machu Picchu, el mausoleo del emperador” (pp. 14 – 38), éste escribe que « No hay duda que allí funcionaba un santuario de rango mayor […] Si seguimos lo que dicen los documentos del siglo XVI, todas las instalaciones agrícolas, que son muchas, estaban destinadas a producir bienes para el culto al Inka muerto […] Machu Picchu queda a más de 100 km, en ferrocarril desde el Cusco […] Bien pudo ser “Patallaqta” (“pueblo que queda en lo alto”), que era el “lugar” donde se guardaba y rendia culto a la momia del Inka Pachakutec.”
¡Después de tantas polémicas, Luis Guillermo Lumbreras va a declarar lo contrario de todo lo que siempre afirmó en el curso de su carrera!
El 09 de febrero de 2013, el periódico local “El diario el Sol del Cusco“, titula en primera planta « Desenmascaran a Jamin. Arqueóloga residente de Machupicchu explica por qué rechazaron solicitud presentada por francés para excavar en la llacta ». Este diario local, siempre hostil a Thierry Jamin y a su grupo, luego dedica sus páginas 02 y 03 para desacreditar los hallazgos realizados por el Instituto Inkari – Cusco en abril de 2012. ¡No más de cinco artículos dedicados a esta historia!
En el primer artículo, titulado “¿Por qué se niega el permiso al arqueólogo francés?”, el periódico explica que, según las crónicas de Garcilaso de la Vega y Polo de Ondegardo, la momia de Pachacútec habría sido descubierta por españoles en el siglo XVI, luego devuelta a Lima. Así, si la momia no pertenecía más a Machu Picchu, las cavidades descubiertas por el Instituto Inkari – Cusco no podían ser pues su tumba. ¡Una lógica de las más… absurdas!
La hipótesis defendida por Thierry Jamin y su grupo querría que las cavidades descubiertas en abril de 2012 por medio de resonancias electromagnéticas correspondieran al Mausoleo que Pachacútec ordenó construir en medio del siglo XV para depositar allí su sepultura y la de su descendencia, o panaca. El hecho de que la momia real se encuentra allí todavía, o que hubiera sido descubierta en el siglo XVI por los conquistadores españoles, y luego devuelta Lima, no quita nada a la teoría de Thierry Jamin.
El segundo artículo esta titulado “El fin de los huaqueros. « Machupicchu es un patrimonio contra el que nadie puede atentar», apuntó David Ugarte”. Su autor, el “periodista” Grimaldo Zúniga C. vuelve sobre declaraciones tenidas por David Ugarte Vega Centeno, Director Regional de Cultura – Cusco. Éste evoca primero el descubrimiento de Machu Picchu por Hiram Bingham, al que cualifica de huaquero, es decir de saqueador. Luego habla de Thierry Jamin, de sus diplomas y de sus investigaciones trás la ciudad perdida de Paititi. Luego vuelve sobre los saqueadores de tumbas y trata de establecer un lazo con Thierry Jamin. “Por eso”, dice Ugarte, “nuestro rechazo a sus pretensiones destructoras es contundente, porque nadie puede venir alegremente al Cusco y decir que va a desmontar las piedras para encontrar a un sarcófago. Si se hiciera eso todo el torreón se vendría abajo.” Es evidente que el Ministerio peruano de Cultura no puede darle un permiso de investigación a un saqueador de tumba.
David Ugarte, que sus propias contradicciones no parecen molestar, luego pide que si Thierry Jamin realmente descubrió algo… “que lo muestre”!
El Director Regional de Cultura luego se entrega a violentas difamaciones en contra de Thierry Jamin: “Reiteró que el único interés de Thierry Jamin es encontrar tesoros ocultos, oro y plata, sin tener el mínimo conocimiento sobre conservación de una importante estructura arquitectónica, etc.”
El tercer artículo, redactado por el mismo “periodista” Grimaldo Zúniga C., publicado al lado del precedente, era titulado “Afirma el investigador francés que, a través de diversos medios, dijo todo lo contrario: « Nunca dijimos que hallamos tumba de Pachacutec. »” En este nuevo artículo, Zúniga pretende que Thierry Jamin habría denegado sus primeras declaraciones que concernaban al descubrimiento de la posible tumba de Pachacútec. Este supuesto periodista parece visiblemente confundir afirmaciones e hipótesis: “El explorador francés Thierry Jamin,” escribe, “dio marcha atrás en sus primeras versiones publicadas en la revista Rumbos de Sol y Piedra y ahora dice que nunca afirmó haber encontrado la tumba de pachacutec, en la ciudad inca de Machupicchu, donde se le está prohibiendo efectuar las excavaciones para extraer restos arqueológicos muy importantes que aún no tiene la certeza de lo que son.”
El artículo, voluntariamente dirigido contra Thierry Jamin, presenta el investigador francés de manera negativa. Jamin jamás afirmó en los medios de comunicación que su grupo había encontrado la tumba de Pachacútec. Éste siempre precisó que se trataba allí de una hipótesis. Y que sólo la apertura de las cavidades y el estudio metódico del material arqueológico encontrado podrán confirmar o no esta hipótesis. En busca de sensacionalismo, algunos pseudos periodistas, lo vemos, están listos para cualquier amalgamas. El lado “nacionalista” tampoco jamás no esta muy lejos…
El cuarto artículo publicado por “El diario el Sol del Cusco”, este mismo 09 de febrero de 2013, es una carta de la historiadora peruana Marianna Mould de Pease dirigida al diario “El Comercio” algunos días antes, en reacción a la publicación del artículo publicado el 19 de enero precedente. Esta carta verdaderamente no es girada contra Thierry Jamin y su equipo. La historiadora peruana vuelve sobre la creación, en 1905, del Instituto de Historia de Perú, hoy Academia Nacional de Historia, y cita a los cronistas Garcilaso de la Vega y Polo de Ondegardo al respecto a las momias reales. Sin embargo, esta carta fue publicada por “el Sol del Cusco” como un elemento “a carga” contra Jamin.
El último y quinto artículo publicado este 09 de febrero en el periódico “El diario el Sol del Cusco” ha sido escrito por la arqueóloga Piedad Champi Monterroso, una de los responsables del Santuario Nacional Histórico de Machu Picchu. Bajo el título “Expediente presentado no cumple con estándares arqueológicos. Informe de Jamin está lleno de imprecisiones técnicas”, se trata de un largo texto en el cual la arqueóloga peruana intenta desmontar el proyecto de Thierry Jamin y de su grupo repitiendo los argumentos contenidos en su informe técnico N° 189, de julio de 2012. En el mismo tiempo, la señora Champi se entrega a su vuelta a una serie de difamaciones en regla, de las que los Internautas se harán a jueces: “Nosotros como profesionales especialistas, al igual que muchos colegas, estamos preparados para proteger, conservar, preservar mediante investigaciones científicas basadas en pruebas objetivas y no subjetivas como el proyecto de la ONG Inkari, que solo demuestra la convicción de apoyar a aventureros, disculpen la expresión : “huaqueadores”, buscadores de tesoros.”
Los arqueólogos y otros investigadores profesionales podrán apreciar el gran nivel de ética profesional de la señora Champi…
En el curso del programa de investigación “Cuarto Poder” difundido el domingo 10 de febrero de 2013 en el canal de televisión ATV, y en parte consagrado aquel día al “asunto Machu Picchu”, la señora Piedad Champi Monterroso se muestra totalmente incapaz de interpretar los resultados y los análisis, sin embargo claros, redactados por las empresas encargadas de realizar las resonancias electromagnéticas a Machu Picchu algunos meses antes. El recurso a los géo-radares en el dominio de la investigación arqueológica esta, hoy día, ampliamente difundido sin embargo a través todo el mundo, desde Europa, hasta México, Egipto y en tantos otros países. Nos asombramos que “grande” arqueóloga desconozca a estas técnicas no destructivas de la arqueología moderna.
El 14 de febrero de 2013, el diario “El Sol del Cusco” persigue con su campaña de denigración contra Thierry Jamin y su grupo. Publicando en primera planta tres fotos de Machu Picchu y de la famosa entrada, siendo acompañado por el siguiente título “Francés busca presionar a través de los medios. DRCC asegura que pedido para excavar en Machupicchu no es serio”, el periódico local dedica de nuevo tres columnas, en página 03, a Thierry Jamin y a su proyecto de investigación a Machu Picchu. El título sólo resume el contenido del artículo redactado por el periodista Grimaldo Zúniga C., el cual parece tener decididamente una extraña concepción de su profesión: “Dejaron sin piso a francés buscador de tesoros. Ministerio de Cultura le negó el pedido para excavar en Machupicchu”.
En este nuevo artículo, Thierry Jamin esta presentado de nuevo como un vulgar investigador de tesoros y su equipo como un grupo de aficionados: “[…] referió que el buscador de tesoros y sus colaboradores no tienen sustento en las explicaciones que esgrimen en el proyecto. […] Dijo que el interés prioritario que tiene Thierry Jamin es hallar un tesoro en una gran caverna funeraria que guardaría considerable cantidad de oro y plata. Por todo ello, se le ha negado la autorización, porque Machupicchu no puede ser objeto de excavaciones o desmontaje de sus muros, solamente porque alguien está ansioso de hallar oro y plata.”
He aquí la idea del periodismo professional según el señor Grimaldo Zúniga. Los verdaderos periodistas apreciarán.
El 15 de febrero de 2013, el periódico “El diario del Cusco” publica en primera planta y en su página 09 uno de los raros artículos completos y verdaderamente objetivos dedicados a esta increíble historia. Bajo el título “Sostiene antropólogo Thierry Jamin « Estamos convencidos que hay un gran tesoro cultural en zona de estudio »”, el periodista presenta luego en cinco columnas los hallazgos realizados en abril de 2012 en Machu Picchu y los desafíos para la historia de Perú que podrían representar la apertura de la entrada descubierta por David Crespy y el estudio del material arqueológico contenido en las cavidades subterráneas.
El mismo día 15 de febrero de 2013, el periódico “El Comercio“, en su página A24, dedica sus columnas al historiador peruano Teodoro Hampe Martínez. El periodista Raúl Mendoza Cápena le concede una larga entrevista consagrada a los hallazgos realizados por el equipo de Thierry Jamin a Machu Picchu y al supuesto emplazamiento actual de las momias incas.
Para Teodoro Hampe, las cavidades descubiertas en el subsuelo del “Templo de las Tres Puertas” por el equipo Inkari podrían corresponder a las sepulturas de la panaca, o lineaje, del emperador Pachacútec. Pero, según él, la momia imperial habría sido llevada a Lima en el siglo XVI por los conquistadores españoles, luego escondida con otras momias incas en una cripta secreta situada bajo las fundaciones del Hospital de San Andrés. El historiador de Lima busca activamente las momias imperiales desde los años ’80 y realizó varias resonancias electromagnéticas al Hospital de San Andrés a principios de los años 2000 con el proposito de localizar la famosa cripta secreta…
A pesar de polémicas mantenidas por las autoridades locales, el 15 de febrero de 2013, la edición española de la famosa revista norte americana National Geographic, dedica un artículo importante al hallazgo realizado por el grupo Inkari en abril de 2012 a Machu Picchu, en su edición en línea. Bajo el título “¿Esconde algo Machu Picchu? Según el investigador francés Thierry Jamin, el subsuelo de uno de los edificios podría esconder una tumba real”, el periodista inglés Alec Forssmann explica de manera objetiva las circunstancias del increíble descubrimiento, sus puestas y polémicas nacientes suscitadas en Perú por las autoridades locales.
El domingo, 17 de febrero de 2013, Hilbert Sumire Bustincio, director del proyecto “Machu Picchu 2012″, y Thierry Jamin, director ejecutivo del mismo proyecto, participan al programa “Debate”, presentado por el periodista Washington Alosilla Portillo, en el Canal 45 de Cusco. Durante este programa dominical muy seguido, Hilbert y Thierry explican al periodista sus temores que conciernen a la voluntad de los responsables locales del Ministerio de Cultura y del santuario arqueológico de Machu Picchu de apropiarse los hallazgos fundamentales realizados por el grupo Inkari.
La entrevista televisada concedida a ambos investigadores será retranscrita en dos columnas el día siguiente, 18 de febrero de 2013, en la página 02 del “Diario del Cusco“.
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